Cuando cambiamos de hogar queremos que todo llegue a su destino en las mejores condiciones. Las obras de arte no son una excepción. Son muchos quienes deciden transportar por sí mismos sus cuadros de una residencia a otra. Pese a que en la mayoría de ocasiones es totalmente desaconsejable debido a la alta probabilidad de que sufran daños, lo cierto es que si estás decidido a llevar a cabo este movimiento queremos que lo hagas con todas las garantías.
En Mudanzas Pablo disponemos de profesionales que se encargan de que durante las mudanzas en Sevilla todo ocurra como debe. Por ello, envolver las obras de arte puede ser uno de los pasos más difíciles y a la vez necesarios.
En primer lugar deberás de conseguir el material adecuado. No escatimes en calidad, dado que será el factor que permitirá que todo llegue al destino como debería. Será necesario cartón de doble cara, cinta para embalar, plástico de burbujas, papel de embalaje y todos los materiales que permitan la máxima seguridad de nuestros cuadros.
Habrá que descolgarlos para ponerlos en una superficie plana. Una vez realizado, colocar los esquineros protectores de cartón. En el caso de que disponga de un cristal, corta un cartón que tenga el mismo tamaño que le mismo. En el caso de que el cuadro se encuentre al aire libre, podrás envolverlo con plástico de burbujas sin problemas.
Posteriormente habrá que fijar el plástico con cinta. En el caso de que sea delicada, pon fijación en las esquina con cinta de PVC. Colócalo en una caja que sea del mismo tamaño que el propio cuadro. Cuando compres la caja, deberás de tener muy claras las medidas del mismo. En el caso de que sea algo más grande, puedes rellenarla con periódico.
Realizar mudanzas en Sevilla en las que participen cuadros puede ser algo más fácil gracias a estos trucos. Cuida en todo momento de tus obras de arte para conseguir mantenerlas en las mejores condiciones durante el mayor tiempo posible.